(Obvias) Conclusiones de una tarde de acción poética

- El malecón2000 es propiedad privada (no sé bien de quién pero es un centro comercial abierto)
- A la mayoría de las personas que pasean un sábado por el malecón no les interesa la literatura
- Hay bastantes fanáticos religiosos en gye (fui bendecido por uno y aun no sé si pretendía defenderme o apoyaba a los de seguridad)
- Un joven y un cartel no atraen nada (más que miradas extraviadas de curiosidad)
- Un joven, un cartel y un guardia/policía atraen mucha atención, la misma que sube el rating de En carne propia
- Los argumentos para botarnos del lugar pasaron de la invocación de reglas/leyes (nunca [de]mostradas) a los sentimientos de culpa e intentos de 'juegos psicológicos'
- Cualquiera puede usar una camiseta con una frase obscena pero no cualquiera puede colgarse un cartelito con un verso de Huidobro (en el sentido de que lo segundo atenta a los 'gustos' de los paseantes)
- Un verso en una camiseta no hace daño a nadie, un verso en un cartelito llevado junto al pecho constituye una manifestación o teatro callejero o publicidad y atenta contra las normas de convivencia municipales
- Los guardias/policías están más preocupados de perder su trabajo que de hacer cumplir normas absurdas.

Por Miguél.

Reuniones literarias ambulantes

Este año(2011) el grupo ha retomado las reuniones o tertulias literarias, ahora en espacios públicos, la idea fue más por la falta de alternativas que hay, en lugares (interiores), por esto se tuvo que optar por invadir los parques de la ciudad (Guayaquil). El lugar es el Malecón del Salado, en una ágora rojiza al lado del patio de mariscos.

El año pasado, no fueron periódicas las reuniones, cada integrante buscó otras alternativas de expresión, hubo cuatro reuniones aproximadamente; en todo caso, el grupo nunca se ha diluido, y ha ganado madurez, en cuanto al compromiso socioliterario hacia el país.

En las reuniones, que se dan cada quince dìas, se leen los textos de cada uno, con la intención de compartir; mas no, de atacar, ni de alabar al texto... Lo que hace crecer el texto es la lectura que cada escritor tenga, y sobre todo la vida comprometida en el experimento con y por el arte.

Buscar la poesía en el mundo, la poesia no se trata de sentarse en un escritorio, hay que poseerla; en la narrativa de igual manera, involucrar el caracter tripartito del Ser (biológico, espiritual y psicológico) en la amalgama que pinta la vida.